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La Sección Sindical de UGT en CaixaBank ha convocado una concentración de delegados sindicales en Valencia, coincidiendo con la celebración de la Junta General de Accionistas, para reclamar mejoras en la atención al cliente y que se reduzca la sobrecarga laboral que sufren los empelados de la entidad a raíz de la fusión.
La secretaria general de Sección Estatal de UGT CaixaBank, Catalina Llibre, ha apuntado que la entidad realizó contrataciones a través de Empresas de Trabajo Temporal (ETT) que no han servido para dar solución a los problemas que se han desencadenado por la fusión como son "la falta de plantilla, las incidencias en los cajeros automáticos, la formación de los empleados y la relentización en el proceso de integración previsto por la entidad".
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UGT inicia una campaña para denunciar la situación que sufre el empleado de Banco Santander.
Hace unos meses, tras los cambios que se produjeron en la alta dirección del banco y después del resultado de la ya famosa, y parece que olvidada encuesta de compromiso, el mensaje que recibimos todos los empleados del banco era que se quería otra forma de trabajar. Ha pasado el tiempo y en las sucursales no sólo no ha cambiado nada, sino que ha empeorado, y mucho, la situación de los trabajadores.
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Ayer las tres patronales, AEB, CECA y Unacc, publicaron un decálogo para la mejora de la atención a las personas mayores y a personas con discapacidad. Tras pasar las últimas décadas enviando a sus plantillas a dar la cara ante los recortes que imponían a sus clientes, ahora las patronales aparecen en el papel de salvadoras de los necesitados.
En UGT nos parece fantástica esta postura, de hecho, llevábamos tiempo reclamando un cambio en su forma de tratar a clientes y trabajadores-as. Tampoco nos sorprende, por desgracia, que lo hayan hecho de manera unilateral, sin contar con las plantillas que dan la cara para apagar los fuegos que encienden sus ideas de “eficiencia”. Pero es absolutamente intolerable el lugar en que el decálogo deja a las personas trabajadoras.
Nos parece insultante que las patronales bancarias hayan encontrado en sus plantillas alguien a quién culpar de su incapacidad para encontrar la eficiencia, de manera que han vuelto a echarnos a los leones.
